El ‘pequeño Nicolás’ se queda solo: sus abogados renuncian a su defensa
Francisco Nicolás Gómez Iglesias (22), más conocido como el ‘pequeño Nicolás’, se queda solo. Los letrados Víctor Sunkel e Israel Paz, que defendían su caso desde su detención el pasado mes de octubre de 2014, han decidido dejar el caso. ¿El motivo? No lo especifican, debido a la confidencialidad profesional con el cliente.
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Así lo han hecho saber en el Juzgado de Instrucción 2 de Madrid, con un documento con fecha del 8 de marzo y al que ha podido tener acceso Efe. El pasado mes de diciembre de 2016, el titular de dicho juzgazo de instrucción, Arturo Zamarriego, dictó una apertura de juicio oral contra el ‘pequeño Nicolás’ por hacerse pasar por un representante del Gobierno y la Casa Real en un viaje a Ribadeo (Lugo) en agosto 2014 para organizar una comida con un empresario. Un viaje en el que, además, fue acompañado por dos policías, también juzgados por usurpación de funciones públicas y cohecho pasivo.
El sumario revelo mensajes con los Pujol, García Revenga o don Juan Carlos
Mientras, Francisco Nicolás se enfrenta a delitos de usurpación de funciones públicas, falsedad en documento oficial y cohecho activo. En un contexto en el que, cabe reseñar, que ‘el pequeño Nicolás’ presentó su teléfono móvil y el sumario de la causa reveló, en el pasado mes de septiembre, mensajes en el dispositivo que demuestran conversaciones del joven con Javier de la Rosa, los ex ministros Miguel Ángel Moratinos y Miguel Arias Cañete, los Pujol o Carlos García Revenga, además de con el propio rey Juan Carlos.
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En este último caso, el contexto del mensaje se deduce de cuando don Juan Carlos abdicó, y Francisco Nicolás le manda un mensaje de agradecimiento. «Señor, gracias por los 40 años de mayor prosperidad que ha conocido España. Gracias por la estabilidad que hemos vivido. Gracias por reconciliarnos sin que ninguna de las ‘dos Españas’ se impusiera a la otra. Gracias por plantar cara a los golpistas que querían acabar con la democracia. Un fuerte abrazo. Francisco Nicolás Gómez Iglesias». El hasta entonces jefe del Estado le respondió: “Millones de gracias por esas palabras. Un abrazo. JC”.
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Ahora, pese a las pruebas presentadas y la facilidad que tuvo el ‘pequeño Nicolás’ para realizar aquel viaje por el que hoy se le juzga, se queda sin defensa.